01 diciembre, 2005

The man with the perfect smile.

TRHOW 'EM ALL AWAY!!!

Es una orden!
No admito titubeos, ni opiniones al respecto... ni siquiera admitiré el más mínimo retraso.
Nadie merece que malgastes tu precioso tiempo en siquiera pensar en pensar en lo sucedido. Nadie. No está bien que pierdas ni una milésima de segundo más de tu vida en ello, no.
Lo pasado pasado está y diste todo de ti a pesar de no recibir ni una décima parte, el problema no está en ti, sino en quien no supo valorar lo que tenía durante el tiempo que se le brindó. Es una pena, sí, pero hay personas que viven y personas que se limiten a malgastar el tiempo utilizando a aquellos que saben vivir.
Una vez un amigo me dijo que hay gente que no merece la vida y por primera vez creo estar de acuerdo con él... no digo que deba morir, digo que no merece la vida, la vida que ha tenido, la tuya. De igual manera que tú no mereces ni un ápice de lo que te está pasando, créeme. No creo que debas siquiera planteártelo, tú mismo dijiste una vez que tenías más valor como persona... esa afrimación no es propia de alguien que se tambalea pensando en si su comportamiento fue adcuado. Hiciste lo que sentías y las cosas hechas con pasión siempre están bien hechas (no sé de qué me suena esa frase...).



Érase una vez un hombre de sonrisa perfecta cuyo carisma sobrepasaba los límites establecidos.

Érase un amigo de los de antes.
Érase una vez un hombre cuya sonrisa perfecta luchaba cada mañana por permanecer en su cara a pesar de que la vida le golpeaba con saña.
Érase una persona íntegra.
Érase una vez un hombre cuyo corazón era tan puro que en ocasiones se planteaba si merecía ser castigado por ello.
Érase un osito de peluche.
Éra se una vez un hombre que merecía ser reconocido por su integridad, su amistad, su buen hacer y su condición de osito...

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